Quizás nunca lo habías pensado, pero te contamos un secreto: según diversos estudios, las personas que entablan amistades fácilmente y que perduran en el tiempo, tienden a aumentar su productividad laboral. Por tanto, otras de las conclusiones que se extraen en dicho estudio, asegura que llevarse bien con compañeros del trabajo fomenta un buen clima laboral y es una de los motivos por los que las personas no desean renunciar a su puesto. Tras esta introducción, te relatamos todos los beneficios que aporta un buen clima laboral en tu clínica dental.
Del compañerismo a la amistad
Todas las relaciones laborales suelen traspasar un poco la barrera de compañeros de equipo para convertirse, en el mejor de los casos, en una amistad sana y sólida. Esto fortalece la unión entre ambos, se incrementa el ánimo y el ambiente de la clínica es muy enriquecedor. A su vez, se va creando un sentido de lealtad y compromiso hacia la marca que representas.
Es muy importante que cómo líder de tu clínica utilices la inteligencia emocional y se promueva la confianza, la claridad y las relaciones personales empáticas entre todo el equipo. Nunca caigas en el error de ser un jefe de “ordeno y mando” que no confía ni sabe delegar en sus trabajadores. Tienes mucho que ganar con una actitud positiva y pensando en como unir a todo tu equipo humano.
Para que exista un buen clima laboral y la desconfianza no reine en tu consultorio, te recomendamos que practiques unos pequeños consejos:
Estúdiate a ti mismo. Para ser un buen líder y transmitir ese ambiente de confianza y transparencia en la clínica, primero deberías empezar por ti. Construye un núcleo de confianza con tu equipo y hazles llegar tu consideración por ellos, tu transparencia. Esta es la única forma en lo que tus trabajadores valorarán tus capacidades como buen líder y te mostrarán respeto y confianza al mismo nivel.
Confianza vs. normas. Establecer un vínculo de amistad y confianza no debe estar reñido con fijar unas normas de convivencia y de trabajo. Por tanto, se deben cumplir unas reglas fundamentales: respeto entre los miembros del equipo y los pacientes, la puntualidad y el profesionalismo.
Establece unos límites: La confianza entre los empleados y el jefe puede dar lugar a pensar que se pueden tolerar unos plazos de entrega más amplios de los fijados por el jefe. Pensar así es un error, por lo que se debe establecer unos límites y saber que el trabajo bien hecho y a tiempo es lo primordial.
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